La defensa de los Texans mantuvo a los Titans en 4 yardas por acarreo sin permitirles ninguna carrera de más de 14 yardas. Foto: César Martínez (Gráfico Sports)
Por John Harris (Houstontexans.com)
A pesar de que no jugó el 100% de las jugadas defensivas, fue un gran alivio para Brian Cushing estar de vuelta en el campo. Este fue uno de esos días en que desesperadamente se necesitaba la presencia de Cushing, en espíritu y juego en el emparrillado. Él salió del campo en situaciones de pase, pero en carrera fue rápido y no perdió el ritmo, llegando a la pelota. Ese fue el Brian Cushing que todos esperábamos ver después de que concluyó el Training Camp.
Su homólogo en la posición de LB interno Benardrick McKinney fue igual de efectivo. Nuevamente lideró la defensa de los Texans con nueve tacleadas.
Quintin Demps siempre estuvo en el lugar correcto. Se ubicó en el sitio perfecto cuando el quarterback de Titans, Marcus Mariota, intentó escaparse por el lado izquierdo en jugada rota y lanzó un pase en el primer tiempo.
Él casi hizo otra intercepción también en el primer tiempo, en un pase equivocado, y en que Mariota se precipitó Mariota. La primera jugada de Antonio Smith como Texan fue impresionante, se alineó como guard medio y saltó a la bola tan pronto como Ben Jones la centró. De inmediato se interpuso entre Jones y el guard derecho Josh Kline. Marcus Mariota buscó lanzar la pelota a Demarco Murray en un pase pantalla en el que Benardrick McKinney detuvo justo antes del 1o y diez. Él fue capaz de jugar debido a que el Ninja ocupó a los dos linieros ofensivos como ráfaga. Posteriormente Smith añadió más presión en el juego.
La defensiva terrestre de los Texans ocupa el lugar No. 27 en la liga, que es algo que nunca hubiera imaginado al comienzo de la temporada. Eso debe mejorar, pero la defensa hizo su parte al mantener a los Titanes en cuatro yardas por acarreo y sin una carrera de más de 14 yardas.